El caminar frecuentemente con mi cámara al hombro y recorrer por muchos caminos me ha hecho conocer a gente increíble. Personas que salen de madrugada de sus hogares o quienes incluso arriesgan su integridad física para ganarse un sueldo honrado y hacer de Querétaro un mejor lugar para vivir.
Estos trabajadores son el rostro de Querétaro.. son los voceadores en Jalpan de Serra, los malabaristas del semáforo en la ciudad de Querétaro, las comerciantes en Pinal de Amoles, las artesanas de Améalco o incluso son los fotógrafos de aquí y de allá, quienes conformamos los oficios queretanos; por ello, este trabajo documental que emprendí desde 2015 tiene la finalidad de retratar la forma en que que desarrollan diariamente cientos y miles de trabajadores sus actividades.

Ella es doña Josefina o "la guera del Reforma", como muchos la conocen, y desde hace 17 años forma parte importante del mercado más grande de San Juan del Río.

Don Rafael ha trabajado por más de 12 años como barrendero en la Secretaria de Servicios Públicos Municipales de la Presidencia Municipal de Querétaro.

Manuel es un trabajador del Centro de Control Canino en San Juan del Río. Desde hace 4 meses que se creo albergue para animales en situación de calle o maltrato físico, él cuida, alimenta, baña y pasea a los cachorros que llegan para posteriormente, y bajo un estricto análisis, darlos en adopción. En la imagen, Manuel juega con campana, una cachorrita que fue rescatada con sarna y que ya está totalmente recuperada y en espera de un nuevo hogar.

Un voceador camina sobre la plaza principal de Jalpan de Serra, Qro. mientras ofrece sus periódicos a la gente que ahí se congrega

Don Aurelio Cárdenas es un carpintero que por más de 37 años ha reparado y elaborado artículos de madera en la calle 16 de septiembre #76. El señor heredó el oficio de carpintero de su padre, quien, según don Aurelio, también trabajaba en el mismo inmueble y el cual se ha resistido a vender debido al valor sentimental que tiene el lugar.

Vender productos de palma es la forma más factible para conseguir dinero a don Nicolás; pues a sus 67 años aún es el sostén principal de su familia

Doña Esperanza, de 76 años y originaria de Pinal de Amoles, no tiene ni esposo, ni hijos y ningún familiar a quien pueda frecuentar, por eso diario llega a las 6 de la mañana al mercado de su comunidad y es la última en irse, pues dice que la gente del mercado es su "única familia" que la ha acompañado por más de 35 años; los mismos que lleva vendiendo las frutas y verduras que cosecha de la hortaliza de su hogar.

Trabajadores del campo realizan sus actividades laborales en La Ladera, Galindo, SJR.

Los voceadores son tan importantes para un medio de comunicación como lo somos los fotoperiodistas, reporteros, columnistas o jefes de información; porque son ellos quienes llevan hasta las manos del lector nuestro trabajo

Decenas de albañiles han trabajado por casi un año en las antiguas instalaciones del ex Hospital General de San Juan del Río, Qro; el cual debido a una inundación por la fuertes lluvias que se registraron en el 2010 fue desalojado y que, ahí mismo, se construye la Ciudad Vive Oriente en 3 etapas. En la imagen, un trabajador de la obra ajusta las tuberías superiores en uno de los techos de la segunda etapa de la misma Ciudad Vive Oriente

Esteban Uribe es un prensista que durante 20 años se dedicó a colectar las impresiones de la máquina de punto continuo que hacían en su trabajo. Esta es una técnica rudimentaria que hasta hoy solo se ejecutaba en 2 imprentas del estado. Lamentablemente la empresa para donde laboraba cerró sus instalaciones este viernes 13 de enero de 2017.

Ella es doña Juanita, artesana oriunda de San Idelfonso, Amealco; y quien cada ocho días arriba a San Juan del Río a vender las carpetas que borda para solventar sus gastos propios.

Carolina: ama de casa, madre soltera, tutora y vendedora de fruta a la vez

México es un país de gente luchona, apasionada y que no le teme al trabajo; muestra de ello es doña Carmen, quien desde hace 8 años vende gorditas, tacos y quesadillas de guiso en un local que acondicionó en la entrada a Senegal de las Palomas.

La ciudad de Querétaro no sería lo mismo sin don Santiago Verde, el reparador de calzado de “5 de Mayo”, pues el zapatero ha visto el crecimiento poblacional, el progreso y la urbanización de la capital del estado desde su taller, donde todos los días repara y mejora los 90 pares de calzado en promedio que recibe, debido a la demanda de sus clientes